Siempre vendo a mi propia clientela debido a la alta demanda de mi producto, a veces incluso me falta. Abastezco a colegios, postas, salas cuna y talleres en Laja.
La calidad de mi producto se debe en gran parte al buen riego que tengo. Anteriormente trabajaba en forestales y planté mosquetas, consideradas entre las mejores. Además, cuento con 416 plantas de piñón negro que son como mi tesoro verde.
Mi relación con Conaf es sólida; han supervisado mi trabajo y me han otorgado beneficios por mi excelencia. Mi visión para el futuro de mi campo es que beneficie a las futuras generaciones de mi familia.